Para todos los que esperabais un pequeño pueblo costero de pescadores, al ver la foto se os habrá ido rápidamente esa idea de la cabeza. Se puede decir que es un Benidorm en toda regla, por los rascacielos. No os dejéis engañar por la foto, y aunque todo apunte a que es una ciudad en toda regla y que en la playa no habrá ni un centímetro cuadrado para poner la toalla, para nada es así!
Lo que es la playa de la ciudad es de aproximadamente 14 km, y desde Palm Beach que es el extremo sur desde donde está tomada la foto de arriba, hay casi 10 km hasta Surfers Paradise. Durante todo ese trayecto se pueden encontrar casitas pequeñas y bloques bajos que sí recuerdan a un pequeño pueblo costero, con unas playas totalmente vacías, y donde curiosamente puedes pasear con tu perro porque está permitido.
Como siempre consejos para futuros viajeros, ya no sólo para esta ciudad sino para toda esta parte del mundo, mucho cuidado con el sol, aquí tienen el agujero de la capa de ozono, que en lo que al pasar un día de playa nos afecta, es que no se debe pasar más de 2 horas al sol (lo dicen los lugareños), por supuesto con crema, si es del 50 mejor, y en las horas de mayor intensidad no os aconsejo ni pasar media hora aunque llevéis protección 90 como llevo yo. Alguno o alguna pensará que soy un exagerado pero de verdad el sol aquí es aplastante, pero no como lo puede serlo en Andalucía en Agosto, es otra sensación, no sabría describirlo, pero de verdad que se siente con mucha intensidad.
Lo que ayuda a soportar toda esa radiación solar es, sin duda, el mar y la brisa marina, como habréis podido ver en las fotos, hay bastantes olas y eso es porque sopla el viento con una intensidad que no llega a molestar pero que te recuerda que está siempre presente.
Si alguno antes se ha quedado pensando, "desde donde ha hecho la primera foto hasta el rascacielos enorme de la foto ha dicho que había unos 10 kms, no estará tan loco como para hacerlo andando?"
Pues sí queridos lectores, con mi mochila al hombro, con mi crema bien extendida y con mis pies ya curtidos después de tanto tiempo viajando, empecé a caminar, la principio no con el objetivo de llegar "a lo que se veía a lo lejos" sino por dar un paseo por la playa. Caminaba un rato, luego me tumbaba, después me bañaba y volver a empezar, hasta que efectivamente llegué a Surfers Paradise
Qué tiene de especial Surfers Paradise? Pues la verdad la playa nada es igual que los anteriores 10 kms pero con más gente, la gracia está en la calle que desemboca en la playa y en el cartel que veis arriba. Es donde encontrareis todo el comercio, todos los hoteles, todas las tiendas, vamos todo el jaleo!
Me hubiese encantado alquilar una tabla y surfear, pero esas olas no son para principiantes como yo, aunque no se aprecia en las fotos alcanzaban de media los 3,5 metros, además llamaba bastante la atención que tenían una frecuencia más rápida de lo normal, y por último rompían lateralmente, demasiado para mi.
Ya que había llegado hasta allí, decidí quedarme un rato largo y bañarme, pude ver a los principiantes que surfeaban por primera vez como yo en Hawai, y la verdad que dieron bastante pena, con esas olas es que ni uno fue capaz de ponerse de pie y se pegaban una paliza para remontar la olas, sólo de pensarlo me entran agujetas! Ah! y no había tiburones que me lo preguntareis, las aguas totalmente claras pero allí ni tiburones, ni medusas ni nada.
Mañana al zoo!
Marioooo, menudo viaje te estás pegando!!! Qué envidia!!!!!!!
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